En relación al escándalo que nos ha tocado presenciar estos días de AC Inversiones es necesario destacar algunos aspectos:
En primer lugar, para una adecuada transacción en acciones se requiere gran experiencia, información ( que hay de sobra ), capacidad de análisis y sentido común sobre el desenvolvimiento de la economía mundial. A este respecto siempre se ha comentado el precario papel de los analistas bursátiles y de los economistas, que son muy buenos para explicar los acontecimientos económicos a posteriori, pero, normalmente no se anticipan a ellos. De allí , que se concluya que el mejor consejero es el inversionista que probadamente ha ganado mucho dinero a través del tiempo con sus operaciones bursátiles.
En segundo lugar, las instituciones bancarias y financieras entregan un interés del 0,3 por ciento mensual que apenas cubre el IPC y que además esta afecto a impuesto. De tal manera, que el inversionista en el mejor de los casos conserva su capital reajustado, pero no gana interés real alguno. Internacionalmente, el fenómeno es parecido y en algunos países peor, por cuanto se otorga un interés negativo. De tal forma,que resulta mejor como decían los antiguos, guardar el dinero bajo el colchón.
En tercer lugar, y como consecuencia de lo anterior, el público, que desconoce estos temas, se deja llevar por muy altos intereses, correspondiendo ellos a sobre el dos y medio por ciento mensual, lo que hacen inmanejable el negocio , más aún en el largo plazo. Estimamos que un interés que se puede ofrecer y que es muy superior al que ofrecen los Bancos corresponde al 1,2 por ciento mensual sobre UF del capital. Atendida la alta volatilidad del mercado de Wall Street es muy manejable y se puede cumplir cabalmente, quedando un margen razonable y justo para el operador, además.
En cuarto lugar, y para que sea seguro , corresponde operar con un monto de capital invertido no superior a los dos millones de dólares, lo que permite al operador-mandatario actuar personalmente con un control total del mercado en que se invierta, y como el de EE.UU. Es muy profundo ( gran volumen de dólares en movimiento) , en caso de una baja importante de una acción invertida, es fácil y rápido vender y liquidar las posiciones aplicandose plenamente el concepto de Stop Lost, vale decir, limitación de las pérdidas.
Juan Carlos Canepa Foppiano.